Carlos Alcides Villalba Algarin, quien culminó la Maestría en Suelos y Nutrición de Plantas en la Escola Superior de Agricultura Luiz de Queiroz de la Universidad de São Paulo (ESALQ-USP) y hará el Doctorado en Suelos y Nutrición de Plantas, también en la USP, a través del Programa Nacional de Becas “Carlos Antonio López” (BECAL) del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), tiene como meta impulsar sistemas productivos que promuevan ambientes saludables para las plantas, los animales, las personas y los ecosistemas en la región.

A su retorno, en su carácter de técnico investigador del Departamento de Suelos del Instituto Paraguayo de Tecnología Agraria (IPTA) en Capitán Miranda, Departamento de Itapúa, nuestro becario espera contribuir al fortalecimiento de los servicios de diagnóstico de suelos, así como a la recomendación de correctivos agrícolas y fertilizantes para aumentar la productividad de los productores. 

Además, pretende potenciar la producción científica a nivel nacional mediante investigaciones avanzadas en colaboración con diferentes actores e instituciones nacionales e internacionales. Indica que estas investigaciones estarán enfocadas en resolver problemas prioritarios, como la degradación del suelo, los bajos rendimientos de los cultivos y la contaminación de los agroecosistemas. 

“Con estos trabajos, me desafío publicar de forma continua en revistas científicas de alto impacto, poniendo a disposición del sector agropecuario información actualizada que apoye la toma de decisiones estratégicas para la sostenibilidad agrícola, económica y ambiental del país”, agrega. 

Asimismo, planea mejorar la visibilidad internacional de la ciencia paraguaya a través de estos aportes. También desea dedicarse a la enseñanza en carreras de grado y posgrado en el área, contribuyendo a la formación de nuevos profesionales con altas capacidades. “De esta manera, podré retribuir al país, colaborando en la preparación de expertos que fortalezcan el crecimiento y desarrollo sostenible del sector agropecuario en Paraguay”, afirma.

Oriundo de San Pedro del Paraná, Departamento de Itapúa, Carlos proviene de una familia compuesta por 12 hermanos, 8 varones y 4 mujeres. Menciona que no todos tuvieron la oportunidad de acceder a una formación universitaria debido a que provienen de una familia de escasos recursos. Sus padres solo pudieron completar hasta el sexto grado de educación primaria. 

Relata que desde que comenzó a trabajar de forma estable, como hermano mayor ha apoyado a mis hermanos más pequeños en sus estudios. Uno de sus hermanos ha logrado egresar recientemente de la carrera de Agronomía, mientras que una de sus hermanas está cursando el último año de Docencia en Educación Básica. Los dos hermanos más jóvenes se encuentran actualmente cursando el Tercer Ciclo Escolar. Por otro lado, los hermanos mayores no tuvieron la oportunidad de realizar estudios universitarios.

Eligió el programa de Maestría en Suelos y Nutrición de Plantas en la Escola Superior de Agricultura Luiz de Queiroz de la Universidad de São Paulo (ESALQ-USP), reconocida como una de las mejores Universidad de América Latina, con el objetivo de especializarse en un área trascendental para el desarrollo sostenible de Paraguay, considerando los desafíos globales actuales, como la degradación acelerada del suelo, la seguridad alimentaria ante el aumento de la población mundial y los efectos del cambio climático.

Su investigación se enfoca en la salud del suelo y la productividad agrícola en los sistemas de producción nacional. Trabaja en la identificación e implementación de estrategias de manejos agronómicos que promuevan la restauración, conservación y mejora de la sanidad del suelo, priorizando el fortalecimiento de sus funciones esenciales y el soporte de los servicios ecosistémicos, para garantizar una producción sostenible y resiliente, capaz de sostener tanto la economía nacional como el bienestar humano y ambiental.

“Con este enfoque, busco contribuir a la transformación del sector agrícola paraguayo hacia un modelo más sustentable, que reduzca el impacto ambiental, incremente la resiliencia frente a eventos extremos y fortalezca la seguridad alimentaria regional y global. A través de esta labor, aspiro a apoyar el cumplimiento de los compromisos internacionales, tales como los Objetivos de Desarrollo Sostenible, la Agenda 2030 y el Acuerdo de París”, resalta.

Sobre su estadía académica en Brasil, Carlos manifiesta que estudiar en la Escola Superior de Agricultura Luiz de Queiroz (ESALQ-USP) fue una experiencia que marcó un punto de inflexión en su formación profesional. A lo largo del programa, trabajó en laboratorios de última generación donde adquirió conocimientos avanzados sobre metodologías para evaluar los indicadores físicos, químicos y biológicos del suelo. Asimismo, desarrolló habilidades para integrar estos parámetros, lo que le permitió comprender mejor los efectos de los diferentes sistemas de manejo sobre el rendimiento del suelo y su capacidad para sostener la producción agrícola de manera sostenible.

“Una de las oportunidades más significativas fue la realización de mi tesis, titulada en portugués “Desvendando a saúde do solo e produtividade agrícola em sistemas de produção na região sul do Paraguay”. A través de este estudio se refleja mi compromiso de generar ciencia a nivel local y viene a ser el primer estudio a nivel país con enfoque integral para la evaluación de la salud del suelo, integrando sus diferentes componentes (físicos, químicos y biológicos), para comprender los efectos de los sistemas productivos predominantes del Paraguay sobre la calidad del suelo y su relación con la productividad agrícola”, explica.

Acota que con ello finalmente busca identificar las practicas agronómicas que restauren la salud del suelo, reduzcan las brechas de rendimiento de las plantas y los efectos negativos en el medio ambiente. Además, destaca que fue el primer trabajo en evaluar la eficiencia de herramientas de usos globales en la comunidad científica en el monitoreo de la salud del suelo en las condiciones edafoclimáticas del país, como la herramienta Soil Management Assessment Framework (SMAF). 

Expresa que esta herramienta de eficiencia comprobada en su investigación, queda como legado para la comunidad científica nacional para mejorar el monitoreo del suelo en los sistemas productivos, generar resultados y generar conocimientos valiosos a base de la ciencia que sirvan a los actores del sector agrario en la toma de decisiones estratégicas para la conservación de recursos naturales, la mitigación del cambio climático y el fortalecimiento del desarrollo productivo.

Carlos sostiene que BECAL le brindó también la posibilidad de establecer vínculos y trabajar en colaboración con investigadores de renombre internacional, así como de compartir conocimientos y experiencias con profesionales de diversos países. Además, este entorno académico, altamente competitivo, potencia su capacidad para abordar problemas desde una perspectiva integral, mejorando sus habilidades de análisis y comunicación científica. 

“Superar los desafíos asociados a esta formación de excelencia representó un crecimiento personal y profesional significativo. Aprender a gestionar investigaciones complejas, interpretar datos de forma crítica y proponer soluciones innovadoras para enfrentar problemas globales, como la seguridad alimentaria y la degradación del suelo. Gracias a esta experiencia, me encuentro preparado para contribuir activamente al desarrollo de sistemas agrícolas más sostenibles en Paraguay. Mi trabajo se enfoca en ofrecer soluciones prácticas basadas en evidencia científica, destinadas a mejorar la productividad, preservar los recursos naturales y aumentar la resiliencia de los sistemas productivos, en sintonía con las necesidades del sector agropecuario actual”, asevera.

Carlos dice que el Programa BECAL ofrece una oportunidad invaluable a los jóvenes paraguayos, en un contexto donde las posibilidades económicas y de formación en áreas especializadas aún son limitadas. Además, permite acceder a universidades de primer nivel alrededor del mundo, donde recibimos una educación de excelencia que sería difícil de obtener en el país.

“A través de esta experiencia, no solo adquirimos conocimientos técnicos y científicos de vanguardia, sino que también desarrollamos habilidades esenciales como liderazgo, innovación y pensamiento crítico. Estar inmersos en ambientes académicos competitivos y tener contacto con expertos de prestigio internacional nos brinda herramientas fundamentales para destacar y contribuir en nuestras áreas de especialización”, refiere.

Añade que, al regresar, pueden aplicar todo lo aprendido en beneficio del desarrollo de Paraguay y que, con los conocimientos adquiridos, los jóvenes pueden ser protagonistas en la solución de desafíos económicos, sociales y ambientales, fortaleciendo sectores estratégicos como la investigación, la educación y la tecnología. De esa forma, se puede impulsar una economía más competitiva y sostenible, contribuyendo al bienestar de la sociedad y a la preservación de los recursos naturales. En este sentido, agrega que BECAL es un motor de transformación que forma talento paraguayo al más alto nivel, permitiendo aportar al crecimiento del país y abrir camino hacia un futuro más equitativo, próspero y sostenible para las próximas generaciones.

Finalmente, indica que BECAL ofrece una oportunidad extraordinaria para que los jóvenes paraguayos se formen en universidades de prestigio internacional, ya que el Programa les permitirá acceder a una educación de excelencia, a conocimientos avanzados y recursos que no siempre están disponibles en nuestro país. 

“Aprovechar esta beca significa abrirse a nuevas experiencias, conocer entornos académicos altamente competitivos y trabajar junto a expertos reconocidos. No es solo una oportunidad académica, es una experiencia transformadora que puede impulsar significativamente sus carreras profesionales. Les animo a investigar más sobre el Programa, preparar y postular con confianza. Esta es una oportunidad para dar un paso decisivo hacia el cumplimiento de sus metas académicas y profesionales. ¡Aprovechen esta posibilidad única para formarse al más alto nivel!”, concluye.